Mensualmente, un laboratorio acreditado ante la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA), y autorizado por la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), monitorea las descargas crudas y tratadas de nuestras dos plantas tratadoras de aguas residuales a fin de dar cumplimiento con la NOM-001-SEMARNAT-1996, la cual establece los límites máximos permisibles de contaminantes biológicos y parasitarios en el agua tratada.
Con estas acciones, se garantiza la sanidad y calidad del agua potable y residual tratada a beneficio del medio ambiente y la salud pública de los usuarios.
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